A Victoria Kent Siano (1898-1987) se le consideró la primera mujer abogado española pero realmente se ha descubierto que fue una letrada del Colegio de Abogados de Valencia. Defensora en el Tribunal de Guerra y Marina de Álvaro de Albornoz por el golpe de estado de Jaca de 15/12/1930 , si fue la primera mujer en el mundo en intervenir ante un consejo de guerra, consiguiendo la absolución de su defendido.
Designada personalmente por Alcalá-Zamora Directora General de Prisiones se dedicó intensamente a la reforma de las cárceles españolas; ordenó la mejora de la alimentación de los reclusos, permitió la libertad de culto en las prisiones, estableció los permisos por razones familiares, cerró 114 centros penitenciarios por estar en pésimas condiciones, eliminó el uso de los grilletes, ordenó construir la nueva cárcel de mujeres de las Ventas, en Madrid, en la que no existían celdas de castigo, y creó el Cuerpo Femenino de Prisiones, para las cárceles de mujeres, y el Instituto de Estudios Penales, cuya dirección encomienda a su maestro Jimenéz de Asúa.
Bruscamente, el 8 de junio de 1932, a los 14 meses de su designación, apareció en la Gaceta de Madrid (el BOE) la noticia de su dimisión. Hasta entonces no había tenido dificultades para llevar a cabo su plan, habiendo recibido el apoyo político del que era Ministro de Justicia, Don Fernando de los Ríos. En esos momentos ocupaba el cargo un nuevo Ministro de Justicia, Don Álvaro de Albornoz, precisamente al que ella había defendido durante la monarquía ante el Tribunal Supremo de Guerra y Marina, obteniendo su absolución, y que, además, pertenecía a su partido, el Radical Socialista. La lógica nos lleva a pensar que el apoyo del nuevo Ministro de Justicia iba a ser, si cabe, mayor que el del anterior, pero no fue así.
Con motivo de las discusiones para conseguir el sufragio femenino, se posicionó en contra de otorgar de forma inmediata el voto a las mujeres. Su opinión era que la mujer española carecía en aquel momento de la suficiente preparación social y política como para votar responsablemente. Sostuvo una polémica al respecto con otra representante feminista en las cortes, Clara Campoamor.
En la Guerra Civil fue destinada a la secretaría de la embajada española en París. Tras la guerra civil pasó al exilio en Francia, donde vivió oculta durante la ocupación alemana. Escribió "Cuatro años en París" (1948), novela autobiográfica narrada en tercera persona cuyo protagonista, Plácido, es un alter ego de la autora y que alude a sus años de exilio en la capital francesa, donde vivió hasta la liberación con una identidad falsa: la de madame Duval.
Tras la Guerra Mundial se marchó a Méjico (1945-1950) donde tuvo cargos en el régimen carcelario.
Llamada por Naciones Unidas, en 1949 viajó a Nueva York para colaborar en la Sección de Defensa Social, con el encargo de estudiar el lamentable estado de las cárceles de América Latina, cargo que abandonó poco después por ser excesivamente burocrático. En Nueva York fundó y dirigió la revista Ibérica desde 1954 a 1974, en la que publicaba las noticias llegadas desde España para los exiliados españoles en Estados Unidos. Aunque viajó a España en 1977, volvió a Nueva York, donde pasó el resto de sus días hasta su muerte en 1987.
No hay comentarios:
Publicar un comentario