El tercer evento más importante del año del calendario oficial de Río de Janeiro, después del Carnaval y de la fiesta de Nochevieja, es el árbol de Navidad de Bradesco Seguros e Previdencia, que flota en el Lago Rodrigo de Freitas de Río de Janeiro durante 12 temporadas consecutivas y que cuenta con 85 metros de altura. Su récord de altura ha servido para conseguir un nuevo título en el Libro Guinness de los Récords como el árbol de Navidad flotante más alto del mundo. Con un peso de 530 toneladas y una base de 810 metros cuadrados construida con 11 flotadores, está situado en mitad del lago, al lado de la estatua del Cristo Redentor, elegida como una de las Nuevas Siete maravillas del Mundo. 2,9 millones de bombillas en miniatura y 37.000 metros de cable de iluminación cubren las ocho superficies, iluminadas por cuatro puntos de luz en movimiento. El ballet del agua, que está compuesto de agua en movimiento, luces y colores, completa el espectáculo. Los chorros de agua se lanzan por medio de 48 bombas instaladas en la base, llegando a alcanzar una altura de 20 metros, iluminándose por medio de luces de colores. La energía consumida por el árbol es suministrada por siete generadores motorizados por carburante biodiesel, con una capacidad total de 2.515 kVA. Un sistema de telemetría computerizado asegura un rendimiento óptimo.
El nuevo desarrollo en la edición de 2007 es la neutralización de las emisiones de carbono (CO2) con la plantación de árboles nativos, a través de una asociación entre Bradesco Seguros e Previdencia y la Fundacao SOS Mata Atlantica.
1 comentario:
Fotografías de Guto Costa.
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