Según la ONU, 923 millones de personas pasan hambre en nuestro planeta. En el último año se sumaron a esta lista 75 millones. Lo paradójico del caso es que el hambre crece en la década en que más alimentos se han producido y curiosamente el precio de los alimentos se duplicó entre 2007 y 2008.
Hafez Ghanem, director general adjunto de la FAO para Desarrollo Económico y Social, ha afirmado, según un comunicado de ese organismo, que la situación es cada día más preocupante, ya que el hambre ha aumentado "mientras el mundo se hacía cada vez más rico y producía más alimentos que nunca durante la última década".
Con que todos y cada uno de los que tenemos el privilegio de pertenecer a sociedades libres y desarrolladas aportara el 1% de sus ingresos, veríamos cómo esas hambrunas desaparecerían para siempre de la faz de la Tierra.
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